Por: Alfonso Morales
Una vez más la cita es en Antigua Guatemala, sus calles
empedradas se ven cubiertas con las alfombras que son puestas a los pies de tan
bella imagen nazarena. Proveniente de una de las aldeas más cercanas al centro de
la ciudad colonial, el Nazareno de la Dulce Mirada hace acto de presencia como
cada cuarto sábado de cuaresma.
Una túnica azul lo reviste en medio de un catafalco que
lo porta, sobre la andaría que llevan en hombros sus devotos cargadores. Así es
como la consagrada imagen de Jesús Nazareno de la Dulce Mirada inicia un año
más su cortejo procesional a los acordes de Jesús de Santa Ana.
Esta vez un mensaje muy preciso: la destrucción de
Sodoma, Génesis Capitulo 19 Del 22 al 25, “Date Prisa y Sálvate”
“Ayudados por dos ángeles quienes les habían advertido de
que el señor iba a destruir su ciudad, Lot su esposa y dos hijas huyeron de
Sodoma. Aunque los ángeles les decían que buscaran seguridad en las montañas
Lot pidió permiso para refugiarse en el pueblo vecino, su petición fue
concedida y le decían “Date Prisa y Sálvate”
No haciendo caso a la advertencia del ángel de no mirar
hacia a tras, la esposa de Lot quedo convertida en estatua de sal. Tan pronto
como los otros habían alcanzado la seguridad Dios hizo llover del cielo sobre
Sodoma y Gomorra azufre y fuego, y arraso estas ciudades y todo el país
confinante, los moradores todos y las ciudades y todas las verdes campiñas del
territorio.”
Este pasaje bíblico fue representado de esta manera:
Sobre un mueble tallado con la habilidad del artesano
antigüeño, que en sus cuatro extremos porta la representación iconográfica de
los cuatro evangelistas, un adorno netamente bíblico muestra una balaustrada
que enmarca una hornacina en la cual leemos la frase evangelizadora de la
decoración “date prisa y sálvate” la imagen de Lot acompañado de sus dos hijas
que se refugian en una ciudad nueva motivando a la humanidad a reflexionar y
hacer un cambio de vida.
Al centro del anda sobre un catafalco de corte sevillano
mixtilínea en un lienzo se aprecian las animas del purgatorio que ruegan a la
Consagrada Imagen de Jesús Nazareno de la Dulce Mirada, ataviado con túnica de
color azur pavo con bordados en hilo de oro y plata, su intersección para el
perdón de sus pecados.
En la parte posterior la esposa de Lot convertida en
estatua de sal tras no obedecer el mandato de Dios de no mirar atrás. La ciudad
de Sodoma y Gomorra arden en llamas como un precedente de Dios ante la lujuria,
homosexualidad, prostitución, vicios y otros pecados terrenales que acabaron con
su paciencia, quien haciendo justicia no se olvido de Lot, que con su ejemplo
se gano la confianza y gracia de Dios, y no quiere imponerlo en forma
unilateral sino darlo al que sabe desearlo de la misma manera que el lo desea,
el no quiere que el limpio muera sino que cambie su mala conducta y viva.
En la parte posterior representando la influencia del
mal, se observa la representación de Lucifer en actitud de sumisión y
rendimiento ante el poder de Dios e incrustada en la ciudad en llamas resalta
la frase “No Caigas en Tentación”, motivando a los fieles a seguir el mandato
de Dios.
Se destaca que el adorno era completado por palomas
reales que simbolizaban la paz para Guatemala.
Acompañado de su santísima madre el cortejo procesional
retorno a su templo al filo de 11 de la noche luego de haber impartido sus
santas bendiciones a todo aquel que salió a su encuentro.
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