lunes, 19 de marzo de 2012

El Santo Del Silencio


Por: Lizbeth Ventura

Uno de los personajes que aparece en pocas ocasiones en las Sagradas Escrituras, es José el Padre terrenal de Jesús. Quien fue escogido por Dios para que fuera el esposo de la Virgen María y Padre de Jesús. Las principales fuentes de información que se tienen sobre José son los primeros capítulos en los Evangelios de San Mateo y San Lucas.

San Mateo (1;16) llama a José el hijo de Jacob, aunque según San Lucas (3;23) el padre de José fue Heli. Se presume que nació en Belén, la ciudad de David del que era descendiente. José vivía en Nazaret antes de que el Ángel Gabriel le anunciara a la Virgen María que concebiría un hijo por obra del Espíritu Santo, al cual pondría por nombre Emmanuel, que significa Dios con nosotros. José estaba comprometido con María y cuando supo del embarazo de María, no conociendo el Misterio de la Encarnación y no queriendo exponer a María al repudio y a una posible condena de lapidación, había decidido retirarse.

Entonces se apareció en sueños un ángel del Señor y le dijo: «José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo. Despertado José del sueño, hizo como el Ángel del Señor le había mandado, y tomó consigo a su mujer." (Mateo 1:19-20, 24). 



José tomó como esposa a la Santísima Virgen María y aceptó la voluntad de Dios, unos meses después había llegado el momento de dirigirse hacia Belén para apadrinarse por decreto del César Augustus, lo cual significó un duro viaje pues María estaba en cinta. (Lucas 2; 1,7).

La Virgen María junto a José buscaron un lugar para que ella diera a luz, pero lo único que encontraron fue un establo, en donde ella tuvo a Jesús y lo colocó en un pesebre, muchos fueron los momentos de angustia de José, pero él en silencio obedeció al Padre, sin reclamo alguno.

Otra de las dificultades que tuvieron José y María fue durante la huída a Egipto, pues un Ángel del Señor se le apareció en sueños a José y le dijo: “Levántate, toma al niño y a su madre y huye a Egipto. Quédate allí hasta que yo te avise, porque Herodes buscará al niño para matarlo.” (Mateo 2; 13).
Luego de la muerte de Herodes, el Ángel del Señor se apareció de nuevo en sueños a José que estaba en Egipto y le dijo: “Levántate, toma contigo al  niño y a su madre y regresa a la tierra de Israel, porque ya han muerto los que querían matar al niño.” (Mateo 2; 19).
Fue así como José tomó al niño y a María y se fue a vivir junto con ellos a un pueblo llamado Nazaret, las Sagradas Escrituras mencionan por última vez a José cuando el niño Jesús es hallado entre los doctores del Templo, no se sabe más sobre ese Santo, a quien Dios designó como Padre de su hijo. Sin lugar a dudas José en silencio realizó una gran labor, pues cumplió todo lo que El Señor le pidió. A San José Dios le encomendó la inmensa responsabilidad y privilegio de ser esposo de la Virgen María y custodio de la Sagrada Familia.

San José es llamado el Santo del Silencio, pues en los evangelios no se registran palabras mencionadas por José, pero él es la muestra fiel de que aún así no siendo Padre biológico de Jesús lo aceptó y lo cuidó hasta el momento de su muerte. El nombre de José en hebreo significa “el que va en aumento”. Y así se desarrollaba el carácter de José, crecía “de virtud en virtud” hasta llegar a una excelsa santidad.

Fue durante el pontificado del Papa Sixto IV (1471-84), en donde San José se introdujo en el calendario Romano, quedando el 19 de marzo como día del Señor San José. Desde entonces su devoción ha seguido creciendo en popularidad. En 1621 Gregorio XV la elevó a fiesta de obligación. Y finalmente Benedicto XIII agregó a San José en la letanía de los Santos en 1726.

En Guatemala muchas Iglesias se encuentran bajo la protección de San José, existe un puerto que lleva su nombre, “El Puerto San José”, colegios como “San José de los Infantes”, seguramente estarán de fiesta en honor al Patriarca San José. En la ciudad capital se encuentra un Santuario el cual lleva su nombre, el “Santuario Arquidiocesano del Señor San José”, ubicado en la 12 avenida y 5ta. Calle de la zona 1.

Así que pidámosle a Dios que nos permita tener una Sagrada Familia, la cual este bajo la protección de San José, y repitamos el siguiente párrafo de un canto muy popular el cual dice: “Todo podría ir mejor si en fervor y en alegría fuesen las Madres María y los Padres San José y los hijos imitasen a Jesús de Nazaret.” 

1 comentario:

  1. Fijate vos, de que son solo los evangelios los que silencian a Jose, pero si le hechas una ojeada a los protoevangelios, si hace una descripcion detallada de la vida de Jose, asi como de aspectos mas personales e intimos de la vida de la sagrada familia, y ademas en los protoevangelios podes encontrar el origen de la vara de San Jose y de porq este la utiliza....y tantisimas cosas mas...

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