La velación se basa sobre la Transfiguración de Jesús en el monte Tabor que se encuentra en Galilea. En el altar mayor se podía observa a Jesús con túnica color blanca, parado sobre rocas y en medio de rayos de luz, lo acompañaban Moisés y Elías.
En la parte de abajo con los brazos en alto como símbolo de adoración se encontraban los 3 apóstoles que tuvieron la dicha de presenciar el acto de gloria y de escuchar la voz de Dios que de repente salió de entre las nubes diciendo: "Este es mi Hijo amado; a él oíd", los apóstoles que se encontraban a los pies de Jesús eran Pedro, Santiago y Juan.
La creatividad del artesano no podía faltar ya que al frente del altar se podía observa una bella alfombra con múltiples colores, adornada de aserrín, fruta, candelas, velas y las aromáticas flores que le daba un ambiente agradable y perfecto a “La Transfiguración de Jesús que significa la confirmación de Jesús como el Cristo y el Hijo de Dios”.
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