Que tienen en común Herodes el Tetrarca, Poncio Pilato y Judas? Creo que todos conocemos la historia, y que son reconocidos como lo más bajo de la humanidad, sin embargo hay algo más que estas tres personas tuvieron en común y que nadie lo ve, y es que a pesar de sus actos Jesús siempre tuvo amor por ellos, él trato de muchas maneras poder toca el corazón de cada uno y aunque no lo haya logrado, no los juzgo, ni los critico y a pesar de que él fue azotado, golpeado, humillado, escupido y crucificado, Jesús no los odió y lo único que pudimos escuchar de sus labios fue “PADRE PERDÓNALOS, POR QUE NO SABEN LO QUE HACEN”.
Ahora les pregunto a ustedes, creen que pueden perdonar a sus enemigos, a esas personas que alguna ves les hizo daño, que los juzgo, que los humillo, que les digo más de alguna grosería, ustedes creen poder perdonarlos? Seguramente sus respuestas serían “NO, NO PUEDO”.. y ¿Porqué no podemos?, ¿Qué nos impide perdonar?, a caso será el orgullo, el que dirán, o que piensa que con perdonar se están humillado ante sus enemigos? ¿Porqué nos importa más lo que digan los demás. que lo que diga Jesús de nosotros?. Si creen eso pues entonces Jesús se ha humillado muchas veces, él siempre perdona nuestros errores, y les he de apostar que en más de alguna ocasión también hemos ofendido a algún hermano/a.
Como ejemplo claro esta también nuestra Santísima Virgen María, a pesar de saber que muchas personas querían matar a su único hijo, nunca tomo represalias contra ellos, ni los insulto, mucho menos los odio, ella siempre fue una mujer humilde, fiel a sus enseñanzas. Ella intercedido por todos nosotros para nuestra salvación.
En esta Cuaresma y Semana Santa limpiemos nuestro corazón y pensamiento, dejemos los pecados capitales por un lado como lo es la Irá y la Soberbia (ORGULLO). Pongámonos como meta principal dejar de ser rencorosos, pedirle a Jesús por nuestros enemigos en vez de desearles el mal, como bien dicen todo lo que deseamos en esta vida se nos duplicará, entonces deseemos el bien. Quizá esas personas pertenecen a nuestras mismas creencias y tradiciones, tal vez las encontraremos en más de alguna procesión, entonces que lógica tendría cargar a Jesús ó a nuestra virgen María, andar en filas, rezando el rosario, si nuestro corazón esta oscuro, que cuando miremos a esas personas será para hacerles un mal gesto, o mirarlos con ojos de odio, creo que no sería lo correcto, en donde quedaría eso de “Amamos a Jesús”, si a la vez odiamos a nuestros hermanos.
Hermanos y hermanas aprovechen este tiempo de fe, esperanza y amor para curar sus heridas, no se trata de olvidar pero si de perdonar, de soltar el pasado y decir “Jesús he aquí tu fiel servidor, me encuentro con el corazón limpio para poder llevarte en hombros y si esas personas me desean el mal, Señor te ruego que las perdones”
La vida es una lucha diaria entre el bien y el mal. Jesús dijo “SI ALGUIEN LOS ODIA A USTEDES, RECUERDEN QUE ME ODIÓ PRIMERO A MI”.
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